Cartel humilde
Autora: Aurora Ruiz Moreno
Para la ocasión, Ruiz Moreno ha planteado a través de un óleo sobre lienzo –con unas dimensiones de 100 x 146 cm.– una visión minimalista de la Virgen de Valme en su talla y con el color rojo –uno de los dos colores corporativos de esta Hermandad– como protagonistas destacados.
La autora explica que esta representación de la Protectora de Dos Hermanas es su “visión favorita” de la imagen fernandina, en la que queda patente la “austeridad, la solemnidad, la delicadeza y espiritualidad que a mí me transmite la Virgen de Valme”. Especialmente al entrar en la Capilla Sacramental de la Parroquia de Santa María Magdalena, donde recibe culto, “sumergida siempre en un profundo silencio”, un lugar donde “siento que el tiempo se para”.
Por lo que, explicó, «yo quería que el cartel fuese algo humilde, ya que la grandeza de la Virgen reside, precisamente, en su humildad«. Además de querer plasmas «lo que a mí me ha transmitido siempre Valme, que es algo solemne y espiritual, con mucha presencia y fuerza». Y a la hora de seleccionar los colores, aclara, «tenía claro que debía reducirlo todo al rojo, ya que para mí Valme es una señal que tenemos todos en el corazón«.
El hecho de representar la talla gótica de este modo es la respuesta que la artista ha obtenido al investigar y profundizar en aquello “que perdura en el tiempo y es hilo conductor entre generaciones” a la hora de hablar de la Virgen de Valme y de su centenaria Romería: la propia esencia de la imagen. Haciéndolo con una visión austera y solemne.
Durante su intervención, el hermano mayor, Hugo Santos Gil, explicó que este cartel «reúne el siglo XIII y siglo XXI, con una silueta de la Virgen levemente esbozada y un lenguaje actual«. Hugo aseguró que «probablemente, el cartel choca, pero un cartel tiene que impactar para que cumpla su misión, además de que el arte, muchas veces, no se dirige a las mayorías, sino a las minorías, y no pasa nada por eso». En su defensa de la obra, afirmó «estar muy orgulloso del cartel ya que creo que la hermandad tiene la obligación y la responsabilidad de aportar, de abrir nuevos horizontes, y no solo hacer locuras, como llevar a Valme a Montequinto, sino también en los artístico».
El hermano mayor insistió en que «el cartel de la Romería de Valme tiene que dar que hablar y, si no lo hace, mal vamos». Además, «como es mi último año como hermano mayor, las críticas que pueda haber, lo digo claramente, me van a dar igual». Aunque reconoció que « la primera vez que lo vi me impactó , pero luego lo he ido asimilando y espero que sea eso lo que pase con el público».
No hay comentarios :
Publicar un comentario